En los últimos años se ha tratado de erradicar la idea de que hay un tipo de cuerpo perfecto, por el contrario, se le está dando prioridad a la naturalidad y sentirse seguros de sí mismo, afortunadamente en este cambio de mentalidad contamos con fuertes aliados, como Tiffany Price, una influencer ‘plus size’ que rompió con estereotipos y en redes sociales muestra su faceta de porrista.
Tiffany Price es una de las influencers a las que no les importa lo que digan de ella, pues está orgullosa de su peso y talla, prueba de ello es que en sus redes sociales constantemente comparte videos en los que se le puede ver muy confiada, pero además no renunció a la idea de ser porrista.
Debido a su peso, Tiffany Price ha sido cuestionada e incluso intimidada para que abandone la actividad, pero en los videos se puede ver que realmente disfruta de esto, así que constantemente encara a ‘haters’ que invalidan su talento solo por no tener un cuerpo delgado.
“Si entras en un déficit de calorías te verás mejor con el uniforme”, “Disculpa, ¿Por qué estás en la sección de atletas?” y “Definitivamente no pareces una animadora”, fueron algunos comentarios que recibió al publicar una fotografía con su uniforme.
Es por esto que la influencer se ha dedicado a compartir videos en los que demuestra que no necesita un tipo de cuerpo para ser feliz siendo porrista: “Repite después de mí: El deporte no tiene tipo de cuerpo”, les contestó.
@tiffanypric.e Getting those skills in for team placements ???????????? #SuperShow #cheertryouts #cheerleading
♬ Jiggle Jiggle - Duke & Jones & Louis Theroux
La contundente respuesta de Tiffany fue aplaudida por muchos, quienes consideran que está haciendo muy bien al ignorar las críticas de personas que en muchos casos, ni la conocen personalmente y se escudan en redes sociales para atacarla.
Por otra parte, su caso ha llamado la atención debido a que está rompiendo los estereotipos que existen sobre cómo debe de ser una porrista, pues ha demostrado que es posible realizar la actividad sin importar el físico.
