La usurpadora llegó a las pantallas de televisión hace más de 20 años y desde su estreno se convirtió en una de las producciones de Televisa más exitosas, pues fue la combinación perfecta de una buena historia y un reparto que incluyó a famosos como Fernando Colunga, Chantal Andere, Dominika Paleta, Juan Pablo Gamboa y Silvia Derbez, entre otros, pero sin duda quien dio la sorpresa fue Gabriela Spanic, quien interpretó a unas gemelas y con su doble protagónico consolidó su carrera.
La telenovela narra la historia de Paola Bracho, una mujer que está casada con Carlos Daniel Bracho, un empresario amable que tiene dos hijos de su primer matrimonio, Carlitos y Lisette. Todo parece estar perfecto entre ellos, pero en realidad ella está aburrida de la vida que lleva y decide irse a Cancún con su amante, Luciano Alcántara.
En Cancún, Paola conoce a Paulina Martínez, quien trabaja en el baño de damas de un restaurante y ambas quedan impactadas por el gran parecido que hay entre ellas, pero esto no es lo más impactante, pues la esposa de Carlos Daniel la convence de que intercambien lugares y ella llegue a la mansión de los Bracho.
En su estadía en la mansión de los Bracho, Paulina comienza a encariñarse con la familia, incluso forma vínculos muy cercanos con ellos y se enamora del esposo, quien cree que es su esposa, pero solo tuvo un cambio repentino de actitud.
En la telenovela, Paulina Bracho se convierte en la gran cuidadora y confidente de sus hijastros Carlitos y Lisette. Cabe mencionar que la actriz que se encargó de interpretar a la niña se llama María Solares y hace unos años recordó a Gabriela Spanic como una gran compañera de grabación y muy amable.
"Entre tomas me leía cuentos y jugaba conmigo juegos de mesa que mi madre llevaba para mí. Siempre me recibía con un caluroso abrazo y me explicaba que en las escenas de Paola debía de ser un poco dura conmigo, que era solo actuación", dijo Solares a la revista People.
Actualmente, María Solares es youtuber, en Instagram tiene casi 23 mil seguidores, con quienes comparte imágenes de su día a día y a principios de 2019 compartió una foto del reencuentro que vivió con la actriz y modelo venezolana.
Lo difícil de interpretar a dos personajes
A pesar de que la actriz venezolana considera que “fue una bendición” haber sido elegida como protagonista de La usurpadora, hace poco reveló que hubo momentos de tensión y estrés detrás de cámaras, pues su acento no era del agrado de la reconocida Beatriz Sheridan (1934-2006) , quien se encargó de la dirección del melodrama.
“Al principio no fue fácil, en Venezuela tenemos un acento muy particular, muy costeño, como el veracruzano, nosotros no pronunciamos las ‘s’. Ella me gritaba con su voz ronca: ‘¡Gabriela, ese acento!’. Me pusieron a trabajar con Adriana Barraza el acento, tuve la oportunidad de trabajar con ella, la amo con toda mi alma”, comentó.
Gabriela Spanic confesó que las exigencias llegaron a tal grado que en varias ocasiones lloró en el set de rodaje, pues a pesar de que trabajó para cambiar su acento, Sheridan no estaba conforme con su estilo: “Yo ponía de mi parte, yo me escuchaba bien, creía que lo estaba haciendo bien, pero me enseñó muchísimo”, comentó en entrevista para TLNovelas.
