Érika Zaba, quien es una de las cantantes de los noventa más importantes, pues desde pequeña mostró un gran talento para el canto y demostró que le gustaba estar bajo los reflectores y las cámaras es por eso que desde que tenía 3 años de edad, la participó en diferentes proyectos infantiles como Juguemos a Cantar, además de ser la imagen de importantes comerciales, concursos de modelaje y hasta en obras de teatro.
La fama para la cantante llegaría en el año 1989 cuando entró a participar en el grupo Onda Vaselina que después se convertiría en OV7, en el cual permaneció más de 10 años grabando discos como Susanita tiene un ratón, Onda Vaselina, Dices para ti, La banda rock, Siete sentidos y Vuela más alto, que los convertirían en uno de los grupos de la década de los noventa más importantes que existen junto a Garibaldi y Timbiriche.
Hoy en día, Erika es una mujer feliz junto a su esposo y su hijo Emiliano, sin embargo a lo largo de su vida ha pasado momentos difíciles como la dura perdida de sus padres en un accidente a los 16 años de edad, en donde también tuvo que pasar un largo tiempo en el hospital y después hacerse cargo de sus hermanos menores.
¿Cuál es la trágica historia de la muerte de sus papás?
Los papás de Érika Zaba fallecieron en un accidente automovilístico cuando ella tenía apenas 16 años de edad, poco se sabe sobre el trágico accidente que provocó que sus padres murieran. Ella en una entrevista para un programa de televisión relató que fue un momento muy duro para ella, pues tras el accidente pasó un tiempo en el hospital recuperándose de los golpes y fracturas y cuando volvió a casa tuvo que hacerse responsable de sus hermanas pequeñas Jessica y Tania Zaba.
“Fue una pesadilla para mí que duró muchos meses, tuve que pasar tiempo en el hospital, en terapia, en recuperación, y una vez que regresé al grupo fue muy duro. Regresé siendo otra, es algo que voy a agradecerles siempre, sin su apoyo no hubiera podido salir adelante”, narró.
La cantante también contó que pese a que su papá era un gran abogado y que le iba bien, no les dejó una herencia muy grande, pues prefería que salieran a divertirse y a conocer el mundo, gracias a que ella ya estaba en OV7, pudieron salir adelante, pues era el único ingreso que tenían.
“Mis papás no nos dejaron una herencia muy grande ni mucho menos, yo ya estaba en La onda vaselina y aunque no ganábamos mucho dinero, pudimos salir adelante, gracias a esto me dio la oportunidad de dormir tranquila y pagar comida, escuela, coches y seguros médicos”, contó la cantante.
Actualmente Erika, disfruta de su familia y de su hijo Emiliano a quien presume constantemente en sus redes sociales pues espero mucho tiempo para poder tenerlo en sus brazos.
