Kaavan es un elefante de 35 años que vivió toda su vida en cautiverio en un zoológico ubicado en Pakistán, se ganó el apodo de “El elefante más solitario del mundo” debido a que en 2012 perdió a su pareja y desde entonces cayó en depresión, viviendo de forma deplorable en un lugar muy reducido y en malas condiciones, atrajo la atención de los medios, pero en el momento no hubo mucho que se pudiera hacer por él, hasta hora que finalmente será liberado de ese lugar.
Es gracias a un grupo de activistas que el elefante podrá ser liberado y conocer a otros de su especie, llevando una mejor calidad de vida por los años que le quedan, esto en una reserva de elefantes en la cual se le reintegrará a la naturaleza de forma gradual para que se adapte fácilmente, ya que vivió todo este tiempo encerrado y puede llegar a ser un cambio abrupto, pero lo que se busca es que en la convivencia con otros elefantes encuentre consuelo.
Se temía que el animal no estuviera en condiciones de ser trasladado y que esto retrasara su rescate, pero afortunadamente ya se cuenta con un permiso veterinario, por lo que en las próximas semanas podría darse la liberación oficialmente y aunque tiene algunos estragos físicos debido al mal trato de su hogar actual, lo más probable es que logre recuperarse tras el proceso de adaptación.
“Tras los controles, que confirmaron que Kaavan es lo suficientemente fuerte, ahora se tomarán medidas para finalizar su reubicación en un santuario de animales potencialmente en Camboya”, fue lo que dijo Free the Wild Global, la organización que se encarga de su traslado.
Parte de el daño físico que presenta el animal actualmente incluye sobrepeso por la mala alimentación, pero a pesar de ello sufre desnutrición también, así mismo sus patas y uñas están lastimadas por el tipo de piso en el que caminaba que no era el mejor para su salud, pero sin duda lo que más ha conmocionado es que el elefante sufre de depresión y soledad extrema.
“Mueve la cabeza de un lado a otro durante horas. Esto se debe principalmente a que simplemente está aburrido”, fue lo que compartieron los especialistas, quienes aseguraron que, sí bien, sería lenta su recuperación, habría cambios en su comportamiento.
