Los más recientes giros en la disputa legal entre Marianne Gonzaga y su ex pareja José Said han reactivado el debate público sobre la custodia de su hija, Emma. Tras una complicada historia que incluyó condena judicial, liberación y recuperación de la custodia, el joven rompió el silencio e hizo fuertes acusaciones contra la influencer.
En una entrevista, aseguró que Marianne habría agredido físicamente a la menor, lo que ha encendido alarmas en redes y medios, pues ambas partes son acusadas de negligencia contra la menor.
José Said asegura que Marianne violentaba a su hija
José Said ofreció una entrevista para Imagen televisión, en donde confirmó que una jueza dictaminó que él recupere la guardia y custodia de la menor, su hija Emma. Así mismo afirmó que Marianne habría ejercido agresiones físicas repetidas contra su hija Emma, cuando aún se encontraban juntos, situación que califica como inaceptable y peligrosa.
“Soy testigo de cómo le llegó a pegar a Emma. Me escribía; del estrés se me cayó del lavabo”, dijo refiriéndose a un supuesto incidente de violencia. Además, acusó que Marianne de usar a su hija como una “moneda de cambio” y de tratarla como un “trofeo” o “accesorio”. “Para ella es un trofeo, es un accesorio”, declaró.
Advierten a Marianne Gonzaga con consecuencias legales por no entregar a Emma
El papá del joven también sostiene que durante los meses en que la niña estuvo bajo su cuidado, se encargaron de todos sus gastos, como vacunas, vestimenta, consultas médicas, y que al informar sobre la custodia, Marianne habría mentido ante la autoridad.
Además, aseguran que tras la liberación de la influencer, ella la habría trasladado a Cancún, y desde entonces no ha entregado oficialmente a Emma, a pesar de la orden judicial.
José Said y su familia aseguran que su intención no es separar a la niña de su madre definitivamente, sino asegurar su bienestar, integridad y estabilidad emocional. “Habrá consecuencias legales … ella ya es una adulta al día de hoy”, advirtió su padre.
Por su parte, la influencer ha denunciado lo que describe como “violencia vicaria” y teme que le quiten nuevamente a su hija, alegando que el padre representa un riesgo por supuestas armas y adicciones, mismas que el joven negó rotundamente. “Una foto era en un láser tag, o sea, literal, pistolas de láser. Otra foto era una tienda de armas, porque me gustan las armas. Pero no significa que por eso yo he matado a alguien”, externó.

