Erika Buenfil sorprendió recientemente al público al posar sin ropa por primera vez en sus más de cuatro décadas de trayectoria artística. A sus 61 años, la actriz mexicana finalmente aceptó participar en una sesión fotográfica con el reconocido fotógrafo Uriel Santana como parte de la obra artística ‘Las formas del alma’, donde mostró una faceta nunca antes vista de sí misma.
La decisión de Buenfil generó un fuerte impacto tanto en los medios de comunicación como en redes sociales, donde fue aplaudida por su valentía, seguridad y capacidad para reinventarse. La llamada famosa compartió que esta experiencia fue un reto personal que le permitió romper esquemas y enfrentarse a sus propios miedos, dejando claro que la sensualidad y la autenticidad no tienen edad.
¿Por qué Erika Buenfil decidió posar al natural a los 61 años?
La actriz explicó que la sesión representó un momento de liberación y autenticidad.
“Me sentí muy arropada. No pensé, porque si pienso no lo hago. No me dejó ponerme nada, me dejó mis pulseras y mis pestañas postizas y se lo agradezco. Fue atreverme a ver qué dice la gente, pero esta soy yo”, confesó sobre el trabajo con Santana.
Buenfil también mencionó que esta decisión se dio de la mano de su crecimiento personal y a un cambio de mentalidad que tuvo en los últimos años. Para ella, su hijo Nicolás de Jesús ya tiene la madurez suficiente para comprender que las mujeres pueden expresarse libremente sin importar la edad.
“Creo que también ya Nicolás está en edad de entender y también creo que de un tiempo a la fecha el mundo cambió, se abrieron muchas cosas nuevas y hay que caminar y crecer con lo que está pasando”, contó.
Este es el proyecto fotográfico en el que participó Erika Buenfil
La obra ‘Las formas del alma’ busca mostrar la esencia de las personas a través de la lente, explorando miradas, heridas y emociones que trascienden lo físico. Erika Buenfil fue una de las figuras invitadas a sumarse a este proyecto, donde cada retrato desnudo se convierte en una expresión de libertad, arte y vulnerabilidad.
La actriz compartió un fragmento de la descripción del proyecto:
“La mirada sobre lo que te rodea. La mirada desde el interior hacia lo de más afuera. La mirada que necesita y quiere explorar, las miradas y las heridas. Desde el alma, hasta el alma a la que le da forma una mirada, la de Uriel Santana”.
A pesar de considerarse una mujer “chapada a la antigua”, Buenfil aseguró que ha aprendido a adaptarse a los nuevos tiempos y que esta sesión es una muestra de ello.
“Me he brincado escalones y rompo conmigo misma, me pongo en la actualidad, me quito un poco de pronto lo chapada a la antigua y tengo la edad para hacerlo”, expresó.