La inyección anticonceptiva se conoce también como “Depo Provera” y la puede aplicar un médico o enfermera cada tres meses como método anticonceptivo práctico, cómodo, eficaz y seguro, siempre y cuando se administre a tiempo.
¿Cuál es la función de la inyección anticonceptiva?
Esta inyección contiene una hormona llamada progestina, la cual previene la ovulación; sin óvulo en las trompas, no puede haber un embarazo. Además, espesa el moco cervical impidiendo el paso del esperma disminuyendo en otro porcentaje la probabilidad de que el óvulo y esperma se junten.
¿Cómo se aplica la inyección anticonceptiva?
Deberás aplicarte una inyección cada 12 o 13 semanas; ni más ni menos. Es un aproximado de cuatro aplicaciones al año. Si la aplicas durante los primeros siete días de menstruación, estás protegida inmediatamente. En caso de que la apliques durante otro día de tu ciclo deberás utilizar otro método de barrera como el condón durante la siguiente semana de la aplicación.
Efectos secundarios (suelen desaparecer después de tres meses)
- Náuseas
- Pérdida de pelo o aumento de vello corporal y facial
- Depresión
- Dolor de cabeza
- Aumento de peso
- Sensibilidad en los pechos
En caso de que la presencia de estos síntomas sea muy persistente, debes consultar a tu médico especialista para que realice las pruebas pertinentes y analice si eres candidata a este tipo de método anticonceptivo, o si es mejor optar por otra alternativa.
También lee: Todo lo que debes saber de los métodos anticonceptivos de emergencia.
