La cantante mexicana Federica Quijano sorprendió a todos al abrir su corazón como nunca antes y durante una entrevista con su hermano Héctor “Apio” Quijano en el programa de YouTube ‘Pipiris Nights’, la integrante de Kabah reveló que es bisexual y compartió el profundo temor que la llevó a ocultarlo durante años: el miedo a perder la custodia de sus hijos.
A sus 54 años, Federica decidió hablar sin filtros sobre su orientación sexual, sus relaciones amorosas y los prejuicios que enfrentó como madre adoptiva. Entre risas y lágrimas la artista mostró una faceta desconocida para el público, dejando claro que detrás de su carisma y éxito en los escenarios, existía una lucha interna marcada por el miedo y la discriminación.
¿Por qué Federica Quijano no había hablado abiertamente sobre su bisexualidad?
En el emotivo episodio de ‘Pipiris Nights’, Federica Quijano confesó por primera vez que ha tenido relaciones tanto con hombres como con mujeres. “Soy bisexual”, dijo sin titubear la famosa y explicó que su forma de amar trasciende el género y que lo que realmente la conecta con una persona es su esencia.
“Me he enamorado del ser humano, de la persona, del corazón de la persona. He tenido hombres maravillosos y he tenido mujeres maravillosas”, compartió Federica con honestidad, enfatizando que para ella, el amor no tiene etiquetas. Aunque no reveló si actualmente mantiene una relación sentimental, sus declaraciones dejaron ver que ha encontrado en la autenticidad su mayor fortaleza.
El miedo que llevó a Quijano a ocultar su orientación sexual
La parte más conmovedora de la conversación llegó cuando Federica habló del miedo que la acompañó durante años: el temor a que su orientación sexual fuera usada en su contra como madre adoptiva. La artista recordó que, al momento de adoptar a sus hijos, vivía con la angustia constante de ser juzgada o de perderlos por ser bisexual.
“Sí ha sido difícil porque, como mujer, y más como adopté a mis hijos, esperan que seas la mamá perfecta para el niño perfecto, para hacer la familia”, explicó con la voz entrecortada. Aunque nunca fue cuestionada oficialmente sobre su orientación, aseguró que el simple hecho de imaginar que alguien pudiera usarlo como argumento en su contra la llenaba de ansiedad.
Federica también contó que enfrentó situaciones en las que sintió discriminación por no tener una estructura familiar tradicional.
“Había escuelas donde iba y me decían: ‘no, pues tiene que tener a fuerza un papá para entrar’. Me daban miedo tantas cosas… ser atacada, juzgada, de que me quiten a mis hijos”, reveló, mostrando lo difícil que fue vivir bajo el peso del prejuicio.