Fue en el 2004 que Malia y Sasha Obama se dieron a conocer tras la senaduría de su padre, Barack Obama, en Illinois, pero no fue hasta que el 2005 que su popularidad aumentó al convertirse en las hijas del presidente de los Estados Unidos de América.
Las dos pequeñas nacieron en Chicago, y fue tras el triunfo de su padre al conseguir la presidencia de EUA que los focos apuntaron hacia ellas, dándoles el reconocimiento mundial.
Sasha, la menor de las hermanas, se graduó del Instituto Sidwell Friends a los diecisiete años para después ingresar a la Universidad de Michigan y continuar con sus estudios.
Se ha convertido en toda una “it girl” pues sus peinados, maquillajes y looks son los más copiados en los eventos a los que asiste.
Mientras que Malia, la mayor de las Obama, ingresó a la prestigiosa Universidad de Harvard al cumplir los dieciocho años.
Si bien desapareció un poco del ojo público tras la salida de la Casa Blanca, los paparazzis han llegado a captarla en bares, piscinas o en partidos de futbol.
Ambas siempre han sido defendidas por sus padres, quienes se sienten profundamente orgullosos de lo que ha logrado cada una a su corta edad.
Tal parece que las Obama además de guapas, ¡tienen mucho que aportar al mundo!
¿Alguna de ellas seguirá la carrera de su padre o de su madre, Michelle?
